lunes, 30 de marzo de 2009

La guerra de los 100 años:






La llamada Guerra de los Cien Años fue una prolongada serie de conflictos armados entre los reyes de Francia y los de Inglaterra que duraron en realidad 116 años (61 años de guerra y 55 de tregua) (1337-1453). Esta guerra fue de origen puramente sucesorio y feudal, pues su propósito no era otro que definir quién sucedería a la rama principal de los Capeto,se extinguió en 1322 los Valois o los Plantagenet, y quién controlaría las enormes posesiones que los monarcas ingleses tenían en territorios franceses desde 1154, debido al ascenso al trono inglés de Enrique Plantagenet, conde de Anjou y casado con Leonor de Aquitania.
Tuvo implicaciones internacionales, con la participación de Castilla. Finalmente y después de innumerables avatares, se saldó con una victoria francesa y la retirada inglesa del continente con la excepción de Calais, que permanecerá en manos inglesas hasta 1558.



Danza medieval:

Las danzas medievales son relativamente mal conocidas, habiendo dejado pocas trazas escritas. Si algunas crónicas de la época hablan de ellas, ninguna las describe, de modo que hoy día es casi imposible saber como eran danzadas.
A esta dificultad se añade el problema del desciframiento musical: la notación musical se hacia en esa época en una pentagrama de cuatro lineas no de cinco como ahora.
Las primeras descripciones detalladas de baile en Europa datan de 1450 en Italia, después del comienzo del Renacimiento. Sin embargo, se sabe que el baile fue popular en Europa durante la Edad Media, ya que es representado en pinturas y miniaturas, y se describe en los textos.
Las formas de danza en la Edad Media incluían el carol y la estampie. El carol consiste en un círculo de bailarines cogidos de la mano, con los bailarines bailando mientras cantaban. Tanto el carol como la estampie son también formas musicales.

Mirad este video, no es de la Edad media, pero lo imitan bastante bien.



Los Caballeros:

Este video es de una escena de los caballeros de la mesa cuadrada. Seguramente es de la Edad Media. Los caballeros eran: en la acepción más pura para la palabra, una persona que monta a caballo, teniendo una gran riqueza en cuanto a significados y connotaciones ya que el hecho de montar a caballo ha significado una condición social muy diferente y cambiante en las distintas etapas históricas. A esto se le llama caballero medieval.La caballería como institución armada a la orden de un rey o poder feudal.

lunes, 26 de enero de 2009

Marta Quiroga Alarcon
مارتا كيروغا الاركون
marta kiruga alarkun

Cecilia Alcalde De Vicente
سيسيليا الكالدي دي بيسينتي
sisilia alkaldi di bisinti


Aquí esta nuestro nombre en árabe, acordaros que se lee de derecha a izquierda. Debajo de la escritura árabe pone como se pronuncía ese nombre.



La imagen de Arriba son las letras de un alfabeto árabe.
La imagen de la izquierda. es un dibujo realizado con caligrafia arabe.Ya que estaba prohibido las imagenes. Si lo observas puedes ver un león y en su interior caligrafía árabe.
En muchos sitios es un arte decorativo propio de los pueblos que utilizan el alfabeto árabe y sus variantes. Se suele considerar como la principal de las artes islámicas. El desarrollo de este arte, como el de la propia escritura, está íntimamente ligado a la expansión del Islam a partir del siglo VII.

lunes, 15 de diciembre de 2008

História Cecilia Alcalde

EL OASIS

A un oasis llega un joven, toma agua, se asea y pregunta a un viejecito que se encuentra descansando:

¿Qué clase de personas hay aquí?

El anciano le pregunta:
¿Qué clase de gente había en el lugar de donde tú vienes?

"Oh, un grupo de egoístas y malvados" replicó el joven.
"Estoy encantado de haberme ido de allí".

A lo cual el anciano comentó:
"Lo mismo habrás de encontrar aquí".

Ese mismo día, otro joven se acercó a beber agua al oasis, y viendo al anciano, preguntó:

¿Qué clase de personas viven en este lugar?

El viejo respondió con la misma pregunta:
¿Qué clase de personas viven en el lugar de donde tú vienes?

"Un magnífico grupo de personas, honestas, amigables, hospitalarias, me duele mucho haberlos dejado".
"Lo mismo encontrarás tú aquí", respondió el anciano.

Un hombre que había escuchado ambas conversaciones le preguntó al viejo:

¿Cómo es posible dar dos respuestas tan diferentes a la misma pregunta?

A lo cuál el viejo contestó:
Cada uno lleva en su corazón el medio ambiente donde vive. Aquel que no encontró nada bueno en los lugares donde estuvo no podrá encontrar otra cosa aquí.
Aquel que encontró amigos allá podrá encontrar amigos acá.

Cuento Marta Quiroga

CUENTO ÁRABE


Había una vez un anciano muy sabio, tan sabio era que todos decían que en su cara se podía ver la sabiduría. Un buen día ese hombre sabio decidió hacer un viaje en barco, y en ese mismo viaje iba un joven estudiante. El joven estudiante era arrogante y entró en el barco dándose aires de importancia, mientras que el anciano sabio se limitó a sentarse en la proa de barco a contemplar el paisaje y cómo los marineros trabajaban.
Al poco el estudiante tuvo noticia de que en el barco se encontraba un hombre sabio y fue a sentarse junto a él. El anciano sabio permanecía en silencio, así que el joven estudiante decidió sacar conversación:

- ¿Ha viajado mucho usted? -

A lo que el anciano respondió: - Sí -
- ¿Y ha estado usted en Damasco? -
Y al instante el anciano le habló de las estrellas que se ven desde la ciudad, de los atardeceres, de las gentes y sus costumbres. Le describió los olores y ruidos del zoco y le habló de las hermosas mezquitas de la ciudad.
- Todo eso está muy bien. - dijo el estudiante - Pero... habrá estado usted estudiando en la escuela de astronomía. -
El anciano se quedó pensativo y como si aquello no tuviese importancia le dijo: - No. -
El estudiante se llevó las manos a la cabeza sin poder creer lo que estaba oyendo: - ¡Pero entonces ha perdido media vida! -

Al poco rato el estudiante le volvió a preguntar: - ¿Ha estado usted en Alejandría? -

Y acto seguido el anciano le empezó a hablar de la belleza de la ciudad, de su puerto y su faro. Del ambiente abarrotado de sus calles. De su tradición, y de otras tantas cosas.
- Sí, veo que ha estado usted en Alejandría. - repuso el estudiante - Pero, ¿estudió usted en la Biblioteca de Alejandría?. -
Una vez más el anciano se encogió de hombros y dijo: - No. -
De nuevo el estudiante se llevó las manos a la cabeza y dijo: - Pero cómo es posible, ¡Ha perdido usted media vida!. -
Al rato el anciano vio en la otra punta del barco que entraba agua entre las tablas el barco. Entonces el anciano preguntó:
- Tú has estudiado e muchos sitios, ¿verdad?. -
Y el estudiante enhebró una retahíla de escuelas, bibliotecas y lugares de sabiduría que parecía no tener fin. Cuando por fin terminó el viejo le preguntó:
-¿Y en alguno de esos lugares has aprendido natación?. -
El estudiante repasó las decenas de asignaturas que había cursado en los diferentes lugares, pero en ninguna de ellas estaba incluida la natación. - No. - respondió.
El anciano, arremangándose y saltando encima de la borda dijo antes de tirarse al agua: - Pues has perdido la vida entera. -

Fin.